Deserción y frustración Ana Pomar, Margarita Romero, y Marcos Galindo. Una de las primeras medidas que tomaron las instituciones educativas al principio de la propagación de las infecciones por COVID19 fue el cerrar las aulas, medida que fue respaldada poco tiempo después por las autoridades federales y estatales. Posteriormente se optó por clases online , el uso de plataformas para la comunicación entre educandos y educadores, y el inicio, indudable, de dificultades a las cuales el sistema de educación mexicano no estaba preparado. Ya a un año de haber implantado un modelo a distancia, se pueden observar una serie de vicisitudes a las cuales cada alumno debe de enfrentarse. Ello inicia con el periplo de contar con las herramientas básicas para poder desempeñar dicha labor: tener una computadora, un smartphone o una tablet para poder conectarse a clases y realizar las tare...
Siéntate con nosotros en compañía de café para compartir temas que nos impactan día con día en estos incipientes intentos de deconstrucción.